Pericos saldrá esta tarde en el Serdán en otra misión complicada frente a los campeones Diablos

J.L. HERMIDA USCANGA

PUEBLA.- Los Pericos de Puebla nunca se han levantado de una desventaja de dos derrotas en una serie de postemporada contra los Diablos Rojos del México.

Por eso, la empresa que tendrán a partir de este sábado en el parque Hermanos Serdán, se presenta con las mismas complicaciones de siempre para la novena poblana cuando encaran al equipo más ganador del beisbol mexicano de verano.

La única vez que, bajo el nombre de Pericos, en 10 de los 12 enfrentamientos de la entidad poblana bajo ese nombre, los verdes fueron a la Ciudad de México y ganaron el segundo enfrentamiento para llegar a Puebla con la serie empatada.

En ese 2023, los verdes como Leo Germán como héroe ganó dos dramáticos duelos para tomar ventaja de 3-2 y consumar la hazaña la misma casa de los Escarlatas.

De ahí, en adelante son sólo derrotas. Algunas por limpia, una 4-1, otras más 4-2 y donde más se defendieron fue en aquella primera calificación a postemporada en esta nueva etapa en el 2003, cuando la batalla se alargó a siete partidos y los poblanos se quedaron a nada de dar el campanazo.

Con los Diablos arriba 2-0, la tarea que comienza hoy a partir de las 16.00 horas se ve súper difícil para los Pericos, que tendrán que jugar un beisbol por nota y perfecto, sin las equivocaciones que cometieron en los dos primeros duelos para domar a un rival con el poderío de los Pingos.

Las que se consideraban las dos mejores cartas del pitcheo no pudieron con el reto. Vladimir Gutiérrez maniató a los Pingos durante cuatro episodios, pero en esa quinta tanda donde enfrentó complicaciones que aceleraron su salida, todo se derrumbó con el pésimo relevo de Liarvis Breto.

Al siguiente día, Yoimer Camacho, héroe en 2023, tampoco ofreció la actuación que necesitaba en el cerrito y los Diablos pegaron por segunda vez.

Ahora, los verdes dejan todo en manos del zurdo venezolano Cleiverth Pérez, un lanzador con amplios recursos, pero que sigue sin explotar cómo el cuerpo técnico desea.

Cleiverth es la esperanza para regresar a la vida a los Pericos, que con una derrota más en la frente estarían ya entregando el equipo.

La afición, que exige con justa razón, pide entrega de sus jugadores y que salgan a partirse el alma, porque si algo no toleran es seguir siendo los clientes predilectos de los Diablos.

Eso sí, al final del juego, pase lo que pase, habrá un bailazo en las afueras del estadio, bien para festejar o para olvidar la derrota.

Del lado de los Diablos, Lorenzo Bundy anunció a Justin Courtney, quien en el primer playoff frente a Yucatán trabajó cuatro entradas y un tercio y se fue sin decisión.

Bien pues, llegó la hora nuevamente de tratar de vencer a la lógica y derrumbar jettaturas.